Flexografia

Descendiente del proceso de impresión anilina, la flexografía tiene una matriz de impresión en alto relieve que se coloca en el cilindro porta-cliché y que recibe tinta líquida a base de solvente o agua.

El cliché recibe la tinta del cilindro entintador en el sistema Doctor Roll o del anilox en el sistema Doctor Blade y lo transfiere al substrato.

Muy utilizada para la impresión en plásticos flexibles como polietileno, polipropileno, BOPP además de papel, cartón, micro-corrugado, laminado y metal, la flexografía se divide en dos segmentos: banda ancha y banda estrecha, con base en el área de impresión. La banda estrecha va hasta 500mm y la banda ancha por encima de ese valor.

Confeccionado en polímero flexible, tiene espesura y dureza específicas para cada tipo de substrato. Está formado por una base de poliéster responsable por la estabilidad para que no se desprenda ni se dilate durante el proceso de impresión.

Las formas de generación del cliché pueden ser convencional que utiliza fotolito con exposición de luz y revelación química, digital en donde la exposición se realiza por haces de láser sobre una capa de carbono o a láser con desbastado del polímero por un haz de láser.

El anilox es un cilindro de hierro, cromo y cerámica con una textura en bajo relieve cuya función es dosificar homogéneamente la tinta y depositarla sobre el cliché. El texturizado del cilindro anilox debe ser compatible con el reticulado del cliché.

Las máquinas para flexografía pueden ser modulares o con tambor central.

En las modulares, los conjuntos de impresión están posicionados secuencialmente y son comunes en el segmento de banda estrecha. En las máquinas con tambor central los sistemas de impresión se posicionan alrededor de un único cilindro de presión en forma de satélite. Son más comunes en máquinas dirigidas a banda ancha.